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MI SUEÑO
Rosa Copello
Bringas
Sentada mi alma
en el ángulo invisible
de esa mesa inconquistable
del salón que mágicamente sueño,
te veo venir a mi encuentro
y mi corazón late a prisa
pensando en la maravilla
de ese sonado gran amor.
Y la danza del cisne
se revive en tus brazos
porque al final mi gran amor
yacerá bajo mi vieja libertad.
31. Diciembre. 1989
AQUEL HOMBRE
Rosa Copello
Bringas
Aquel Hombre de la blanca figura
en esa curva de las pistas del espacio,
yo sé que indicaba su mirada juguetona
y ÉL sabe que yo nunca más podría olvidarlo.
Y la mano abierta con la herida sangrante
-por donde pasó mi pequeñez absurda-
me enseñó el camino que debiera tomar,
y mis penas y mis propias heridas dejaron de ser.
Esa noche debió ser eterna, para mí,
conjugué en extraña simbiosis
lo terreno, lo divino, lo mágico y lo deseado.
1982
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